El 7 de julio de 1994 en Trujillo, Valle, paramilitares integrados a la estructura conformada por narcotraficantes, militares y policías, que fue apoyada por el Batallón Palacé de Buga y el distrito de Policía de Tuluá, detuvieron, torturaron y ejecutaron a LISÍMACO MARTÍNEZ. Su cuerpo fue sepultado en la hacienda Villa Paola. Era trabajador del narcotraficante Henry Loaiza a quien le hurtó unas armas entregadas por miembros del batallón Palacé, armas que llevó a la vivienda de Alba Lucía Martínez, detenida y desaparecida el 14 de julio. Ese mismo día fue detenido y desaparecido en Riofrío el hijo de Alba Lucía, Hoober Martínez Osorio. El 16 de julio fueron ejecutados los hermanos José Arnulfo y Raúl Peñaloza, testigos de dicha detención. El 30 de julio fue ejecutado Genaro Serna Pabón, esposo de Alba Lucía. El 24 de septiembre fue ejecutado Albeiro Bedoya Buitrago, quien acogió a las niñas de Alba Lucía luego de la desaparición de ésta. El 30 de septiembre sería ejecutado Orlando Orozco Londoño, testigo de la ejecución de Albeiro Bedotya.
Fuentes:
1. CINEP Paramilitarismo de Estado en Colombia 1988-2003
