El 17 de octubre de 1990 en Sabana de Torres, Santander, el pescador ALEJANDRO MENDOZA de 30 años, fue asesinado de un disparo en el cráneo propinado por dos sujetos que llegaron hasta su vivienda en la Inspección Departamental Providencia. Hacía dos meses había salido de la cárcel, después de pagar una condena por asesinato.