El 26 de septiembre de 1990 en Caucasia, Antioquia, paramilitares bajo la etiqueta de La Mano Negra asesinaron a JOHN JAIRO MUÑOZ S., JOAQUÍN ESTRADA TOVAR y FRAIDY ARLEY GIRALDO ECHEVERRI, en el barrio Pueblo Nuevo, en la denominada “Zona de Tolerancia” (1).
Relata un familiar de una de las víctimas: "El día 26 de septiembre era su día de regreso. Pero antes de tomar el bus que lo traería de vuelta a Medellín a las 11 pm, ... le dijo a mi madre que iría a la tienda de la esquina ubicada a la mitad de la cuadra a tomarse una gaseosa antes de salir.
Yo hice cálculos mentales sobre la hora aproximada en que mi hijo estaría de vuelta en casa y pensé que estaría entrando a eso de las 5 de la mañana.
A esa misma hora, me llamó mi sobrino a darme la noticia de que habían asesinado a mi hijo, manifestándome que “La Mano Negra” había hecho una limpieza social a las 10 pm aproximadamente y una camioneta había pasado por esa calle disparando indiscriminadamente contra las personas que se encontraban allí en la tienda y que entre las víctimas mortales, estaba mi hijo.
Yo llegue a Caucasia ese mismo día temprano junto con los funcionarios de la funeraria y nos dirigimos directamente al cementerio. En ese lugar, se me acercaron dos hombres a preguntarme qué relación de familia tenía con mi hijo, mi lugar de residencia, mi estrato socioeconómico y si estaba dispuesta a tomar alguna represalía en contra de los homicidas de mi hijo, en caso de saber quienes fueron. A lo que yo contesté que no tenía ningún interés en ello, luego de ver mi actitud se retiraron.
Minutos después se me acerca una señora que fue testigo presencial de los hechos y me dijo que mi hijo compró una gaseosa en la tienda y ya se estaba despidiendo de ella, cuando llegaron “LOS PARACOS DE LA MANO NEGRA” en un carro blindado disparando y que una de las dos personas que se me acercó había sido quien disparó junto con otros más, esa noche. 8 días después, me contaron que habían asesinado a la señora en su casa, en Caucasia.
Una semana despues, cuando mi familia regresó a Caucasia después de realizar las honras fúnebres de mi hijo en Medellín, fueron desplazados mi mamá y mis sobrinos de su casa en Caucasia, obligándolos a abandonar su terreno y sus enceres, ya que les dieron un ultimátum de dos horas para salir. Yo los recibí en mi casa" (2).
FUENTES:
1-CINEP Paramilitarismo de Estado en Colombia 1988-2003
2-Testimonio de un familiar