José Federico Florez

Fuente: VOZ PROLETARIA
1. Estudiante
Hechos
El 22 de mayo de 1980 en La Ceja, Antioquia, miembros de la fuerza pública asesinaron a JOSÉ FEDERICO FLOREZ, estudiante de primaria de sólo 14 años, de un tiro de carabina que le penetró por la parte posterior de la cabeza con orificio de salida en la cara. Varias personas resultaron con lesiones de arma de fuego en diferentes sitios.
Relata la fuente: “El 11 de mayo de 1980 el joven LUIS FERNANDO RAMIREZ ECHEVERRI, obrero de la construcción, de sólo 18 años, fue asesinado por miembros de la policía. La reconstrucción del crimen se efectuó a las 11 de la noche del 22 de mayo. En el desarrollo de la reconstrucción los inculpados trataron de falsear los acontecimientos, manifestando que todos los familiares del fallecido, en el momento de ellos ir a realizar la detención, habían salido armados, viéndose por ellos “obligados a disparar”. Esto levantó los ánimos de los curiosos y vecinos presentes, los que protestaron enérgicamente. Un niño arrojó un guijarro contra una bombilla cercana, por lo cual el agente Eliseo Orozco empezó a golpearlo. Su proceder llenó de ira a la población y se generó el incidente. La policía huyó hacia el parque de la poblacion, mientras las gentes les gritaban: “Asesinos mentirosos!”. La policía se hizo fuerte frente a la alcaldía, desde donde empezaron a disparar contra quienes protestaban. Uno de los heridos comentando la situación dijo: “Todo era un desorden; las gentes corrían de un lado a otro tirando piedras en respuesta a los disparos de la policía y quemaron varios carros, pero no es cierto que el pueblo disparara. Solamente la policía lo hizo”. El saldo de esta nueva incursión de la fuerza pública fue la muerte de JOSE FEDERICO FLOREZ, estudiante de primaria de sólo 14 años, a quien un tiro de carabina que le penetró por la parte posterior de la cabeza con orificio de salida en la cara. Varias personas resultaron con lesiones de arma de fuego en diferentes sitios. En las primeras horas del sábado 23, el comandante del Batallón Girardot, con sede en Medellín, pero en operaciones en el lugar, en compañía del cura de la localidad, trató de intimidar al padre del niño fallecido para que el entierro se realizara en las primeras horas del día, lo cual no consiguió ante la erguida posición del doliente, quien le respondió al militar que el muerto era su hijo y nadie más correspondía decidir cuando y donde le daban sepultura".
Fuentes:
- 1. COBARDE MASACRE POLICIAL EN LA CEJA Voz Proletaria, Junio 12 de 1980