El 29 de junio de 1988 en Lebrija, Santander, RAFAEL BUITRAGO LATORRE, de 70 años, fue asesinado en horas de la noche. Relata la fuente: “La situación que presentaba este municipio entre 1988 y 1993 en cuanto a la incursión del paramilitarismo, es ambivalente. Por un lado se puede notar la acometida paramilitar en las zonas rurales contra el campesinado propiamente dicho, incursionando en caravanas de la muerte a las veredas para amedrentar y asesinar a los campesinos en sus propias parcelas, o dejar sus cuerpos en otros parajes. Pero por otro, en razón de la proximidad de Lebrija con la ciudad de Bucaramanga, varios sitios de la localidad se transformaron en lo que se llamó popularmente “botaderos de cadáveres”, especialmente las zonas rurales más próximas a la capital, donde las víctimas de la “Limpieza Social” eran abandonadas allí luego de ser sometidas a un suplicio de muerte incontable e inimaginable; el estado en que se localizaban sus cuerpos era sin mayor consideración el triste vestigio de la barbarie paramilitar”.
Fuentes:
1. PROYECTO COLOMBIA NUNCA MÁS ZONA 5ª - Crímenes de Lesa Humanidad 1966-1998 • PROVINCIAS SANTANDEREANAS