El 27 de mayo de 1976 en Puerto Boyacá, Boyacá, un miembro de la Policía del puesto del corregimiento del ''Marfil'' asesinó a ARNOLDO VALENCIA, campesino ampliamente conocido en esta región como un trabajador honesto. En la fecha indicada cuando Arnoldo esperaba carro en la residencia de la señora Clara Clororado a eso de las cinco de la tarde en el sitio “El Diamante” para viajar a la finca de propiedad de Carlos Ruiz donde había venido trabajando últimamente, apareció un policía de nombre Vicente Vargas en avanzado estado de embriaguez, preguntando a otra persona “quién era ese tipo”. Sin medir explicación alguna el uniformado notificó a Valencia que “quedaba detenido”. Lo condujo por entre unos potreros en dirección al cuartel de policía. De un momento a otro el policía gritó al campesino: “Alto, hijueputa”, dándole golpes en la cara y disparando después su carabina contra el cuerpo del trabajador, quien perdió la vida al día siguiente en el hospital de esta localidad, a donde fue trasladado por campesinos que presenciaron el caso. Este nuevo crimen oficial ha suscitado la natural indignación entre los sectores populares que ven recrudecer la violencia gubernamental contra el pueblo.