Argemiro Guerrero Sandoval

Fuente:
Hechos
El 30 de julio de 2004, ARGEMIRO GUERRERO SANDOVAL y RICHARD OMAR SANCHEZ ACEVEDO, fueron asesinados por miembros de la patrulla CENTAURO 4, adscrita al Grupo Mecanizado No. 18 “General Gabriel Reveiz Pizarro”, al mando del Subteniente Alberto León Riveros, en hechos sucedidos en la vereda Puerto Rico, jurisdicción de Saravena (Arauca).
Relata la fuente: “Hacia las 7:00 p.m., arribaron alrededor de 12 militares, de la patrulla Centauro 4, adscrita al Grupo Mecanizado No. 18 “General Gabriel Revéiz Pizarro”, al mando del Subteniente Alberto León Riveros, a la finca de Carmen Rosa Sandoval, madre de Argemiro Guerrero. Al llegar los militares preguntaron por Argemiro, procedieron a registrar la casa por completo, permaneciendo en ella por espacio de media hora. Allí se encontraba la compañera sentimental de Argemiro y sus tres hijos, todos menores de edad. Durante este lapso los militares amenazaron a la señora Rosalba Báez y a sus hijos. Les preguntaron por lo que tenían escondido y por el lugar en el cual se encontraba Argemiro Guerrero porque la próxima vez que vinieran no iban a respetar ni al más pequeño. La amenaza se materializó cuando los militares golpearon al niño Luis Alaín Guerrero Báez y al señor Efraín Villamizar Otero. A Rosalba Báez le preguntaron insistentemente sobre el lugar en el cual se encontraba una caleta que había en esa casa, que colaborara, que no le pesara porque de aquí a mañana, refiriéndose a Argemiro Guerrero, lo traían muerto. De la casa procedieron a llevarse $400.000, dinero perteneciente a la junta de padres de familia de la vereda Puerto Rico. Argemiro se encontraba, desde hacía una semana trabajando en la finca de Carlos Zambrano ubicada en Los Bancos, territorio venezolano. Argemiro se disponía a regresar a su finca el 30 de Julio de 2004; iba a atravesar el río Arauca pero antes entró en la casa de Isaías Pita, en la frontera Puerto Rico–Saravena, territorio venezolano. El Ejército llegó a la casa de Isaías hacia las 11:00 p.m., donde encontraron a Argemiro Guerrero, Richard Omar Sánchez y Luis Hernando Botias. Los militares los llamaron, los hicieron salir, los empujaron e hicieron acostar en un hormiguero, los golpearon, los amarraron y torturaron. La casa fue registrada. A Luis Hernando lo obligaron a que los pasara por el río, lado colombiano de la frontera. Los militares le dijeron que se acostara y se tapara para que no viera nada, obligándolo a devolverse. Luis Hernando observó cómo arrastraron a Argemiro y a Richard, luego escuchó los disparos de ráfagas y bombas. Los militares los uniformaron y les dejaron armas. Al día siguiente, una vecina le avisó a Rosalba Báez que, cerca de allí habían encontrado unos muertos quienes eran Argemiro Guerrero y Richard Omar Sánchez. Ambos fueron presentados como subversivos del Ejército de Liberación Nacional -ELN- muertos en combate. (…) El Subteniente Alberto León Riveros, el Sargento Viceprimero Oscar Marino Camilo Mosquera, el Soldado Regular Ricardo Gaitán García, el Soldado Regular Juan Esteban Gordillo, el Soldado Regular Ovidio Avello Becerra, el Soldado Regular Edwin Rodríguez Morera y el Soldado Regular Heiner Antonio Inocencio Lombana, hacían parte de la unidad militar que ejecutó extrajudicialmente a Argemiro Guerrero y Richard Omar Sánchez”.