El 19 de septiembre de 1983 en Cali, Valle del Cauca, jefe de redacción del diario El Caleño y colaborador de RCN, ALIRIO MORA BELTRÁN, fue tiroteado en la puerta de su oficina. Había recibido amenazas de muerte después de haber acusado de fraude a funcionarios locales. Se pensó que la policía podía estar implicada en el asesinato (1).
O como Alirio Mora Beltrán, el agudo y querido periodista con quien laborábamos en un conocido periódico de la ciudad que lleva por nombre el gentilicio de los naturales de estas tierras, y quien al entrar la noche del 19 de septiembre de 1983 fuera acribillado a balazos en las puertas del diario, según se dijo también en aquella época, por “fuerzas oscuras”.
En el caso de Mora Beltrán, no le perdonaron que tuviera en sus manos documentos que comprometían en actos de corrupción a personajes encumbrados que temían ser denunciados por la pluma del periodista palmirano, de cuyo suceso no se volvió a saber y hoy nadie, o casi nadie para ser justos, se acuerda de él, ni siquiera porque uno de los barrios más populares del Distrito de Aguablanca fue bautizado con su nombre (2)
Fuentes:
1. OBSERVATORIO IBEROAMERICANO DE LA LIBERTAD DE PRENSA
2. LUIS ALFONSO MENA S. Reflexión presentada por el autor en el Foro Conflicto y Memoria: Medios de Comunicación y Perspectivas Políticas en Colombia 2010-2014