Una nueva jornada de violencia vivió ayer la región de Urabá. En menos de doce horas fueron asesinados dos militantes del movimiento Esperanza, Paz y Libertad (EPL). Las autoridades capturaron a cuatro presuntos miembros de la disidencia de esa antígua agrupación guerrillera. Entre tanto, dos reclusos de la cárcel de Turbo fueron liberados por dos grupos de hombres armados.

eltiempo.com
11 de septiembre de 1992
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Voceros del Departamento de Policía Urabá informaron que, en el barrio Buenos Aires, zona urbana de Turbo, fueron atacados varios miembros de EPL por miembros de la disidencia armada de esa agrupación.

En el hecho murió Luis Enrique Pacheco Hernández, de 23 años, de Lorica (Córdoba), militante del movimiento político. Quedó herido Martín Hincapié, 17 años, comerciante de Medellín. Como presuntos responsables del crimen, la Policía logró capturar a Román de Jesús Taborda Benítez, 24 años, y al agricultor Manuel Salvador Bedoya, 23 años, quienes tenían en su poder un revólver calibre 38 y una pistola calibre 9 milímetros automática.

En otro atentado, en la finca La Samarra de Chigorodó, desconocidos asesinaron con arma de fuego al ex combatiente del EPL y trabajador de oficios varios, José Virgilio Bonilla.

Con este nuevo hecho de violencia asciende a un centenar el número de ex guerrilleros de esta organización que se acogieron al proceso de paz y que han sido asesinados. Los principales escenarios de estos crímenes han sido la región de Urabá, donde han muerto a manos de las FARC y de la disidencia del EPL. En Norte de Santander, donde los grupos paramilitares han perseguido a los ex combatientes del EPL y, en la Costa Norte, donde han sido ejecutados también por grupos paramilitares.

Asimismo, a disposición de la Unidad de Policía Judicial de Urabá fueron dejados ayer dos supuestos guerrilleros detenidos en Carepa. Se trata de Mario Sánchez Pérez, 28 años, al parecer integrante de la disidencia del EPL, y Ricardo Bravo Yoluique, 19 años, presunto integrante del Quintín Lame.

Los dos son trabajadores de la finca Potosí y las autoridades. Se les encontró una foto reciente en la que aparecen con armamento de largo y corto alcance. Liberan presos Entre tanto, varios hombres armados liberaban a dos presos de la cárcel de Turbo, en dos hechos distintos.

Cuando se dirigía a una audiencia pública en el Juzgado Penal del Circuito de Apartadó, en compañía de dos guardianes, fue liberado Carlos Enrique Roldán Echavarría, sindicado por homicidio. Igualmente, cinco hombres liberaron al recluso Heriberto Colorado Colorado. El interno salía de una cita médica en el hospital de la localidad e iba acompañado de un guardían.

El recluso y el guardián fueron llevados en un vehículo hasta el corregimiento de Currulao. Allí, el guarda fue despojado de su uniforme y de su armamento y dejado en libertad. Los hombres escaparon con el recluso.