En Curumaní (Cesar) se escuchan versiones de un posible ajuste de cuentas entre paramilitares y guerrilla. Familiares de las víctimas lo niegan. Lo cierto es que la noche del sábado pasado cinco personas fueron asesinadas en un establecimiento público donde ya se había presentado otro atentado.

eltiempo.com
17 de mayo de 1999
http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-866897

Según la Policía, varios hombres con pistolas automáticas irrumpieron en el bar El Tania, ubicado en el barrio la Cruz y dispararon indiscriminadamente contra las personas que allí departían.

Las víctimas mortales fueron identificadas como Luis Albeiro Cardona Pérez, de 21 años de edad; Alfreddy Vicente Mercado, de 22; Carmelina Gómez Carrillo, de 22; Wendy Gutiérrez y un joven a quien llamaban Cocho .

A Wendy Gutiérrez la llevaron viva al hospital Rosario Pumarejo de López, de Valledupar, junto con Julio Tovar Martelo, pero minutos después falleció.

Tovar Martelo, de 28 años y natural de Corozal (Sucre), se encuentra en la unidad de cuidados intensivos de ese centro asistencial.

Mi hijo trabaja con su tío en Curumaní fabricando materas y nunca ha tenido problemas con nadie , afirmó su padre, que lleva el mismo nombre.

Tovar Martelo presenta heridas en el cráneo y en la pierna izquierda. Un especialista del hospital manifestó que su pronóstico es reservado.

Un vocero de la Policía informó que las víctimas no registran antecedentes penales que puedan orientar hacia los móviles del atentado. Sin embargo, en el municipio se escuchan versiones sobre un posible ajuste de cuentas entre paramilitares y subversivos.

La Policía y el Comando Operativo No 7 realizan trabajos de inteligencia para identificar a los responsables del hecho y ejercer mayor control en esta zona, donde tiene influencia el frente Camilo Torres, del Eln.

Otra vez Curumaní

El 19 de diciembre del año pasado, en el mismo establecimiento y en similares circunstancias un grupo atacó a los clientes y dejó once heridos.

El atentado ocurrió a las 9:30 p.m., cuando llegaron tres hombres en un Renault 21, color negro, lanzaron una granada y sostuvieron un tiroteo con personas que estaban dentro del negocio.

Salen habitantes

Por este suceso y otros más que se presentaron entre finales de 1998 y principios de 1999, en enero pasado EL TIEMPO asistió a un desplazamiento masivo de habitantes de Curumaní, específicamente del corregimiento Santa Isabel.

En ese poblado el 8 de enero un grupo paramilitar asesinó a once personas y sentenció a sus habitantes: tienen que abandonar el pueblo en 24 horas, porque de lo contrario hasta los perros van a tomar sangre .

Una anciana de 80 años fue una de las víctimas. Ella murió incinerada dentro de su casa de barro y techo de palma, ante la mirada impotente de su hija y de su nieto, que alcanzaron a buscar refugio y se escondieron en medio de la maleza.