2-Paramilitares (AUC Autodefensas Unidas de Colombia Bloque Norte )
Hechos
Víctimas en estos hechos:34 (Asesinadas: 34 - Desaparecidas: )
El 17 de enero de 2001 en Ovejas, Sucre, paramilitares bajo la etiqueta de “Bloque Norte de las AUC” ejecutaron a treinta y cuatro campesinos, en Chengue, corregimiento de este municipio. De ellos, diez habían sido llevados por los paramilitares y, en consecuencia, reportados como desaparecidos. Sin embargo, algunas horas después de la masacre, se supo que cuatro menores que hacían parte de las diez personas desaparecidas, habían sido puestos en libertad por los victimarios. “Los otros seis campesinos”, informa una de las fuentes, “aparecieron muertos por el sector del municipio de Carmen de Bolívar, en un lugar conocido como Macayepo”.
Pudieron ser registrados los nombres de 28 de las 34 víctimas: RUSBEL OVIEDO BARRETO, JUAN BARRETO, NÉSTOR MONTES MERIÑO, ANDRÉS MERIÑO MERCADO, ARQUIMEDES LÓPEZ OVIEDO, ASUEL LÓPEZ OVIEDO, CÉSAR MERIÑO MERCADO, CRISTÓBAL MERIÑO, DAIRO LOÓEZ MERIÑO, DAIRO MORALES DÍAZ, ÉDISON BERRÍO SALAS, ELKIN MARTÍNEZ OVIEDO, SANTANDER LÓPEZ OVIEDO, GEOVANNY BARRETO, VIDENCIO QUINTANA, GUILLERMO MERIÑO, JAIME MONTES MERIÑO, JOSE MONTERROZA, NÉSTOR MERIÑO CARO, MAIRON QUINTANA BARRETO, LUIS PÉREZ, JUAN CARLOS MARTÍNEZ, LUIS LÓPEZ MERIÑO, LUIS ENRIQUE BUELVAS, PEDRO ADÁN CARO, FIDENCIO QUINTANA MEZA, RAFAEL ROMERO MONTES y ALEJANDRO MONTERROZA MERIÑO.
El ingreso de los paramilitares al lugar de los hechos, donde permanecieron por espacio de dos horas, se produjo a las 3:00 de la madrugada “por los lados de Chinulito, corregimiento de Colosó, en tres camiones”. Algunas fuentes informan que los victimarios actuaban bajo las órdenes de una mujer que respondía al sobrenombre de “Beatriz”. Se denuncia, además, que éstos “llegaron gritando y pateando las puertas de las viviendas; las derribaron al suelo; sacaron a los habitantes a la fuerza de sus casas, para luego reunirlos en la plaza principal del pueblo”, donde “separaron a niños y mujeres” de los hombres. “Varios campesinos fueron obligados a tenderse en el piso para asesinarlos con un tiro en la cabeza”, a otros “los degollaban con machete” y, por último, a otros “los mataban con macetas de piedra y palo”. Luego procedieron a incendiar treinta viviendas de la población y las pocas que quedaron fueron pintadas con consignas alusivas a AUC. Según declaraciones de testigos de los hechos, “horas antes y minutos después de ocurrida la masacre (...), la zona fue sobrevolada por helicópteros militares”. Uno de los habitantes precisó que “dos helicópteros verdes militares volaron en círculos”, y añadió: “Son los mismos que he visto antes, sólo que ahora iban y venían. No sabemos qué querían”. Los sobrevuelos militares, ocurridos después de la salida de los paramilitares, se extendieron por espacio de 15 y 30 minutos. Por otra parte, la información añade que tres días antes de la acción una avioneta paramilitar “similar a la que el año pasado lanzó panfletos antiguerrilleros cuando llegaron los paramilitares” sobrevoló el área.
En este proceso se encuentran vinculados por conductas omisivas el comandante de la Primera Brigada de Infantería de Marina General Rodrigo Alfonso Quiñónez Cárdenas y otros oficiales de la Brigada del Ejército Nacional, pues a pesar de tener conocimiento del paso del grupo armado la noche anterior a la masacre no hicieron nada para evitar este execrable crimen (CAJAR)(1).
Otras de las víctimas fueron: LUIS MIGUEL ROMERO BERRÍO, PEDRO MANUEL BARRETO ARIAS y JULIO CESAR LORA CANOLE (2).
Fuentes:
1-CINEP Paramilitarismo de Estado en Colombia 1988 - 2003
2-LINA MARIA GONZALEZ CORREA - Poder local, justicia social y reacción paramilitar: violencia en los Montes de María (1965-2010)