Tensa es la situación de orden público en Aguachica, luego de los hechos violentos que les ocasionaron la muerte a tres personas en el interior de un prostíbulo de razón social ‘Bar Acapulco’, reconocido en la región por ser el centro de crímenes en los últimos años.

El Pilon.com.co
Por Álvaro Lora García

De acuerdo con la versión oficial, la noche del lunes varias personas se encontraban departiendo en el interior del establecimiento público, entre las que se encontraban un oficial de la Séptima Brigada con sede en Villavicencio y un efectivo retirado de la Quinta Brigada del Ejército, que días antes había llegado a Aguachica, a pasar las fiestas de fin de año con su familia.

“Eran las 11 de la noche, cuando escuché una cantidad de disparos y gritos que me hicieron saltar de la mecedora donde estaba sentado, y al salir a la puerta me dí cuenta que un sujeto salía corriendo con una pistola en la mano, echando bala por todas partes”, comentó un vecino del sector.

Al llegar las autoridades a la escena del crimen, se dieron cuenta que en el lugar se encontraban los cuerpos sin vida de Jesús Albeiro Quintero Alsina, militar retirado y miembro de una reconocida familia de Aguachica.

A menos de un metro estaba tendido José Luís Portillo Callejas, quien recibió innumerables impactos de bala en diferentes partes del cuerpo.

Heridos quedaron Luís Alfredo Leiva Núñez, administrador del bar, quien fue llevado de urgencia al Hospital Regional de Aguachica, de donde tuvo que ser remitido a Valledupar por la gravedad de sus heridas, pero a menos de un kilómetro murió en la ambulancia.

Al Hospital Regional también llegó con siete impactos de bala en ambas piernas, el soldado profesional Deiby Torrealba, quien no dio explicación de cómo logró llegar conduciendo una motocicleta con ambas piernas destrozadas por las balas.

Las primeras versiones sobre la masacre revelan que un grupo de jóvenes que por extrañeza resultaron ser reservistas y militares activos, departían en una mesa del establecimiento cuando un sujeto, que arribó al lugar en motocicleta, se acercó y sin mediar palabras comenzó a disparar en todas las direcciones.

Además de las primeras víctimas mortales, fueron llevados al ‘José David Padilla Villafañe’ con heridas de bala, el cantinero identificado como Luís Alfredo Leiva Núñez, quien falleciera posteriormente y el soldado Deiby Ochoa Torrealba, quien fue remitido a un centro hospitalario del tercer nivel por la gravedad de sus heridas.

Este es el tercer hecho que se presenta en el Bar Acapulco; hace exactamente dos meses fue asesinado el cantinero de ese negocio cuando atendía a unas personas, y ahora un nuevo cantinero o barman y tres de sus clientes son víctimas de los violentos.

La víctima del 5 de noviembre de 2008 respondía al nombre de Nahum Chogó Ibáñez, de 30 años, natural de Pelaya, quien era el administrador del bar Acapulco, ubicado en la carrera 40 de Aguachica.

Las víctimas fatales del caso de ayer, tres jóvenes cercanos a los 27 años, junto a un tercer hombre que resultó herido, tenían una particularidad: habían sido reservistas y otro en la actualidad es orgánico de la séptima brigada.

Sobre este hecho violento, el comandante de Distrito de la Policía, capitán Carlos Andrés Valencia, aseguró que en días anteriores solicitó a la Secretaría de Gobierno Municipal el cierre definitivo del ‘Bar Acapulco’, ya que en ese lugar permanentemente se presentan riñas y muertes violentas, al igual que prostitución en menores de edad.

Aseguró el oficial que no entiende por qué a estas alturas no se ha sellado ese prostíbulo que ha causado en los últimos meses sangre y dolor para muchas familias de Aguachica.