Doce personas desaparecidas, amenazas de muerte a funcionarios públicos y el secuestro aislado de ocho mujeres por grupos dedicados a la trata de blancas, denunció ante el Ministerio de Gobierno y entidades de derechos humanos, el personero de Ocaña, Francisco Antonio Coronel Julio.
eltiempo.com
23 de julio de 1995
http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-371510
El funcionario rechazó además, las medidas de seguridad utilizadas por la Policía Nacional, que cercó el cuartel con materiales explosivos, poniendo en peligro la integridad de 50 familias de la cabecera municipal de San Calixto.
Coronel Julio, aseguró que han desaparecido por lo menos ocho jovencitas entre los 15 y 20 años, quienes, según sus informes, fueron trasladadas a Cúcuta o Bucaramanga para realizar trabajos de prostitución.
Además de esta situación el personero se mostró preocupado por el regreso de la violencia, que ha vuelto a cobrar la vida de personas dedicadas al trabajo y reconocidos como ciudadanos de bien .
Según informó el personero de Ocaña, las personas desaparecidas son las siguientes: Pedro Cabreles Aycardi, dedicado a la actividad ganadera, fue secuestrado hace tres años aproximadamente; Ramiro Moro Toro, sacado de su finca localizada en el municipio de González, hace más de un año.
Saul García Parra, agricultor de 28 años, desapareció el 27 de diciembre de 1994 cuando se dirigía de Ocaña a la localidad de El Carmen.
Astolfo Vega Navarro, agricultor plagiado por varios hombres armados que se lo llevaron de su residencia ubicada en la vereda Guayabal.
Manuel Velázquez Luna, oriundo del municipio La Playa de 52 años, desapareció en Cartagena después de realizar un viaje a esa ciudad.
Numael Robles Torrado, de 40 años. Salió de Magangué con una carga de tomate y no regresó.
William Escobar Lara, maestro de escuela del corregimiento de Palmarito en el municipio de San Calixto, desapareció después de terminar la jornada en un centro educativo.
Chiquinquirá Sánchez de Picón, de 75 años, secuestrada en su residencia en Convención junto con su hijo Eduardo Picón Sánchez. Su esposo Miguel Picón, ya había sido secuestrado hace ocho meses aproximadamente.