El ex rector del Colegio Cooperativo de Gaira y presidente de la Cooperativa Multiactiva El Rosario de Gaira, Cooperoga, fue asesinado de varios impactos de bala por desconocidos ayer en horas de la tarde.

EL INFORMADOR – PAGINA WEB
17 Noviembre 2006
http://www.mineducacion.gov.co/cvn/1665/printer-113189.html

El docente fue identificado como Ramiro Rafael Romero Coba, de 42 años de edad, natural del corregimiento de Punta de Piedra, área rural del municipio de Zapayán y residente en la casa demarcada con la nomenclatura 9 – 18 de la calle 3 con carrera 9 de Gaira, estaba casado con Angélica Paola Fernández con quien tuvo dos hijos, era el segundo de 10 hijos de la unión matrimonial conformada por Ramón y Librada.

Los hechos

De acuerdo a las informaciones dadas a conocer por personas que se encontraban transitando por la calle 6 con carrera 12 del corregimiento, lugar de los acontecimientos, manifestaron que el profesor Romero Cobas, se había bajado del vehículo de servicio público que procedía del municipio de Ciénaga identificado con las placas SIT – 348 con la intención de cambiar en una tienda un billete para pagar la carrera, al llegar al local comercial, el conductor de taxi referenciado como Fernel Mario Delgado Cruz, se encontraba parado detrás de Ramiro Rafael a la espera de la paga, cuando de repente ingresó uno de los sicarios, quien le propinó dos tiros, uno en el cuello y otro en la cabeza, el educador ante el ruido de las balas, corrió para salvar su vida, pero fue perseguido por el asesino, quien le disparó en repetidas oportunidades causándole la muerte de manera inmediata.

La persona herida, es natural y residente en la calle 17 con carrera 18 del barrio La Estación de Ciénaga, es el mayor de tres hijos de la unión matrimonial entre Mario Delgado y Mariela Cruz, ambos fallecidos.

El hecho causó conmoción y pánico entre las personas que se encontraban en la zona comercial de Gaira, quienes en medio del desespero trataron de ocultarse para no ser alcanzados por los proyectiles.

Cerca al lugar de los hechos fue hallado Un Chevrolet Swift de color rojo, de placas QEZ – 408 de propiedad del profesor, el cual había dejado por problemas mecánicos.

Estaba amenazado

Según declaraciones entregadas a EL INFORMADOR por algunos miembros de la agremiación que el educador presidía y que no quisieron revelar su identidad por razones de seguridad, Ramírez Coba venía siendo objeto de amenazas de muerte desde hacía aproximadamente tres meses y que a pesar de las llamadas telefónicas intimidatorias nunca dejó de desarrollar sus labores diarias.

Así mismo adujeron que la ultima amenaza la recibió hace tres días y no tenían la menor idea de donde provenían.

De igual manera aseveraron que son varios los miembros del Consejo de la Administración de la cooperativa que han puesto a conocimiento de las autoridades competentes su temor por lo que les pueda pasar y que algunos de también han sido amenazados de muerte a través de llamadas telefónicas.

Repudio General

El asesinato del docente generó repudio entre la ciudadanía samaria y en la comunidad educativa de la ciudad y el departamento del Magdalena por la manera como le fue segada la vida a la persona que en vida luchó incansablemente por la educación de muchos estudiantes que hoy lloran su partida y que sin duda se ganó el cariño y respeto de todos los agremiados en la cooperativa que dirigió por varios años.

Para el día de hoy, profesores y estudiantes del Colegio Camilo Torres donde oficiaba como docente sentarán su voz de protesta con un cese de actividades con le fin de pedir justicia y que se de prontamente con la captura de los asesinos.

Entre tanto, los organismos del Estado iniciaron las respectivas labores investigativas a fin de dar con le paradero y la identidad de los sicarios que se movilizaban en una motocicleta de alto cilindraje en la que huyeron con rumbo no establecido.

Las labores de inspección y levantamiento del cadáver fueron adelantadas por parte de funcionarios de la Fiscalía General de la Nación Seccional URI de Santa Marta en asocio con agentes de la Policía Nacional y su cuerpo fue conducido hasta la morgue de medicina legal, de donde fue reclamado por familiares y amigos para darle cristiana sepultura.