La siguiente información es un resumen de las declaraciones del vocero del ACNUR Kris Janowski durante la rueda de prensa del día 10 de febrero de 2004, en el Palacio de las Naciones en Ginebra, Suiza.
acnur.org
Fecha: 10 Febrero 2004
http://www.acnur.org/paginas/?id_pag=2064
El ACNUR condena el asesinato de dos miembros de la Asociación Comunitaria de Desplazados de Apartadó, ASOCODEA en la ciudad de Apartadó, Antioquia. Marta Cecilia Aguirre, de 36 años, madre de 4 niños y Giovanni de Jesús Montoya Molina, de 45 años, padre de una niña de año y medio, fueron asesinados el domingo 8 de febrero frente a sus respectivas residencias en el barrio 20 de Enero de Apartadó, en ataques separados perpetrados por hombres armados vestidos de civil.
El ACNUR hace un llamado urgente a las autoridades para que investiguen los hechos y castiguen a los responsables, además de garantizar la seguridad de los miembros de organizaciones de población desplazada que han recibido amenazas contra ellos o sus familias, en diferentes partes de Colombia.
La señora Aguirre, desplazada del departamento de Córdoba desde el año 2000, fue fundadora de la organización ASOCODEA en la cual ocupó el cargo de Presidenta y posteriormente de Vicepresidenta. El señor Montoya Molina, desplazado hace 5 meses de la zona rural del municipio de Frontino (Antioquia), era miembro del comité socioeconómico de ASOCODEA.
El ACNUR hace llegar públicamente sus condolencias a las familias de las víctimas y manifiesta su solidaridad con los miembros de ASOCODEA y otras organizaciones de población desplazada en Colombia, que han sufrido ataques y amenazas. La agencia continuará trabajando para fortalecer las comunidades y apoyarlas en la defensa de sus derechos. La violencia debe terminar.
Los asesinatos de la señora Aguirre y del señor Montoya Molina se inscriben dentro de una serie de ataques contra defensores de los derechos humanos de los desplazados internos en Colombia, particularmente mujeres. En septiembre pasado fue asesinada Francis Girón Quilindo, dirigente de una asociación de mujeres desplazadas en la ciudad de Puerto Asís, Putumayo. Otra activista, Esperanza Amaris Miranda, fue asesinada el 16 de octubre en la ciudad de Barrancabermeja. En diciembre, luego de un ataque contra la sede de la organización Casa de la Mujer, en Bogotá, el ACNUR condenó públicamente estos hechos. La semana pasada, una integrante de la Organización Femenina Popular de Barrancabermeja fue brutalmente atacada.
ASOCODEA fue fundada por familias desplazadas en el año 2000 en Apartadó y cuenta actualmente con 220 familias afiliadas. La mayoría de sus miembros provienen de diferentes municipios de los departamentos de Córdoba, Antioquia y el Chocó. Desde sus inicios ha contado con el soporte del ACNUR a través de proyectos de fortalecimiento comunitario.
El trabajo del ACNUR en Colombia busca la protección y la promoción de los derechos de los desplazados internos y el apoyo y fortalecimiento de la respuesta del gobierno y la sociedad civil frente al desplazamiento forzado. Trabaja en coordinación con las autoridades colombianas, grupos eclesiásticos, ONGs, asociaciones de desplazados internos y otras agencias de Naciones Unidas.
El gobierno colombiano tiene registrados a más de un millón de desplazados internos, pero las ONGs estiman que la cifra real podría bordear los 3 millones de desplazados en el país. De acuerdo con fuentes oficiales, el 74 por ciento de los desplazados son mujeres y niños.
Casi la mitad de las personas desplazadas son mujeres adultas. Muchas de ellas han sido víctimas de violencia sexual y muchas debieron asumir el rol de jefes de familia tras la muerte o desaparición de sus esposos. Más de un tercio de las familias desplazadas están encabezadas por mujeres.
Acuerdo con UNIFEM: en otro acontecimiento, el ACNUR firmó un acuerdo el 6 de febrero con el Fondo de Desarrollo para la Mujer de la ONU (UNIFEM) para llevar a cabo actividades conjuntas en Colombia. Ambas agencias decidieron coordinar sus esfuerzos y buscar recursos y otras agencias asociadas, a fin de mejorar la asistencia que se brinda en la actualidad a las mujeres de todas las edades que sufren las consecuencias del conflicto en Colombia. Se espera identificar pronto algunos de los proyectos piloto conjuntos entre las dos agencias de la ONU.
UNIFEM trabaja en Colombia desde 1994, y está consolidando y ampliando sus operaciones para dar prioridad a los esfuerzos de fortalecimiento del rol de la mujer en la construcción de la paz y para apoyar a las mujeres desplazadas.
El ACNUR trabaja en Colombia desde 1998, con el mandato de promover la protección y las soluciones duraderas para los colombianos, tanto hombres y mujeres, víctimas del desplazamiento forzado.
El enfoque del ACNUR enfatiza la restauración de los derechos, considerando las necesidades específicas de diferentes grupos de la población de desplazados. Se han destinado esfuerzos especiales para fortalecer las organizaciones de la mujer, ayudar en el desarrollo de líderes desplazados femeninas y respaldar las campañas de documentación para los desplazados y las poblaciones vulnerables (de las cuales las mujeres constituyen el grupo principal) que realiza el Registro Civil Nacional.
