El 6 de mayo de 1965 en cercanías de Riochiquito, en los límites de Cauca y Huila, los campesinos ICAR TRUJILLO, JAIR TRUJILLO, DANIEL HOYOS, VICTOR JULIO MEDINA, ANDRES PEÑA y OTRA PERSONA no identificada, fueron bárbaramente asesinados por una banda de “pájaros” frentenacionalistas. La gran prensa publicó la noticia pero VOZ PROLETARIA se abstuvo de incluirla en su pasada edición por no tener entonces confirmación del hecho.
Icar era un joven de 19 años hijo del dirigente agrario de Riochiquito Ciro Trujillo; Jair era primo hermano de Icar y también persona joven.
El crimen se produjo cuando una cuadrilla de no menos de cuarenta pájaros, supuestamente comandados por el conocido bandolero frentenacionalista Miguel Valencia, quien tiene su sede de operaciones en Belalcázar (Cauca), emboscó a un grupo de campesinos que iban de viaje hacia Pacarní (Huila), llevando artículos agrículas para el mercado de esa población. En varias ocasiones anteriores los criminales han asaltado a los campesinos de Riochiquito en esa misma ruta, dejando un saldo de varios muertos y heridos.
En esta última los pájaros, que merodean por las zonas limítrofes con Riochiquito, bajo el amparo de unidades del ejército y la policía, se aprovecharon muy especialmente de la complicidad de las autoridades para movilizarse hasta el sitio de la emboscada y regresar luego a sus guaridas.
La primera información sobre el crimen la suministro la gran prensa capitalina afirmando dizque un grupo de campesinos pacíficos había respondido un asalto perpetrado por más de cuarenta “bandoleros” provenientes de la región de Riochiquito y habían dado de baja a cuatro de éstos, dejando dos gravemente heridos. Al día siguiente los periódicos de la oligarquía hubieron de rectificar tan inicua noticia y reconocer que campesinos de Riochiquito habían sido las víctimas.
La actitud de la gran prensa refleja las verdaderas intenciones del crimen del 6 de mayo. Los pájaros de Belalcázar, Iquira, Teruel, Tópagay otras zonas adyacentes a Riochiquito son desde hace años instrumento ciego del latifundismo y el clericalismo caucano y huillense, sectores que en los últimos meses han recrudecido acremente su campaña para exigir al gobierno la agresión armada a Riochiquito. Actos como el del 6 de mayo tienden a crear el pretexto para la agresión, porque hasta ahora hasta los conservadores de Pacarní, Tesalia y otros lugares han reconocido públicamente que en Riochiquito no existe bandolerismo ni esa es una zona de violencia “comunista” sino que sus habitantes son trabajadores de la tierra que surten el mercado (1).
El 6 de mayo de 1965 en El Quicuyal, en cercanías de Riochiquito, en los límites de Cauca y Huila, el ejército acribilla cobardemente a los jóvenes campesinos ABACUT, ICAR y JAIR TRUJILLO, DANIEL COLLO, VICTOR JULIO MEDINA, ANDRES PEÑA y FLORESMIRO SAAVEDRA. Los primeros, hijos del c. Ciro Trujillo Castaño, dirigentes de la juventud comunista. Las tropas perpetraron el crimen con alevosía y premeditadamente. Con vileza! (2).
Fuentes:
1. VOZ PROLETARIA Año III - Num 74, Pag. 3, Bogotá, D.E., Mayo 20 de 1965
